El calamar gigante o también conocido como Kraken es una de esas leyendas vivientes que de vez en cuando se asoma por las costas de medio mundo, aunque siempre encallados en las rocas o arrojados por las mareas a la orilla del mar después de morir. Estos auténticos monstruos marinos, han sido desde siempre temidos por las antiguas civilizaciones, que ya fueran marinos o simples pescadores, temían antes las leyendas terroríficas de este dios de los abismos del mar. El Architeuthis, nombre científico del calamar gigante, se alimenta de casi todo tipo de peces, así como diferentes animales de las profundidades y parece que muy raramente de ejemplares de su misma especie de menor tamaño. El kraken, suele habitar entre los 500 y 1500 metros de profundidad y su mayor peligro son los enormes cachalotes, que gracias a un aceite llamado Espermaceti y que se encuentra en su cabeza, es capaz de bajar hasta esas profundidades. Sus capturas y apariciones sobre la costa están muy repartidas, pero si tenemos que concretar donde han sido mas repetidas hay que señalar sobre todo al norte de Europa, especialmente las costas nórdicas y en España en el Mar Cantábrico, así como Nueva Zelanda y Estados Unidos. Según la ciencia existen al menos diez clases de calamares gigantes, siendo el de mayor tamaño el Architeuthis Dux, que puede llegar a alcanzar los 20 metros de longitud, contando con sus larguísimos tentáculos, y los 1000 kilos de peso. Diferentes expediciones han investigado el hábitat, costumbres, y vida de este gigante de los mares, entre ellas las organizadas por National Geografic en Nueva Zelanda y el CSIC en España junto a otras organizaciones. Pero el calamar gigante sigue a día de hoy siendo toda una incógnita, aunque desde hace tiempo haya dejado de ser una leyenda de los mares para convertirse en toda una realidad.